Reflexiones en torno al Ekeko (*)

El Ekeko, denominado en los últimos tiempos como el “diosecillo de la fortuna” es el personaje asociado a la feria de las Alasitas que, consecuentemente se la denomina ahora “la feria de los deseos”. Son signos de modernidad o símbolos de economía liberal aymara como lo plantea Jurgen Golte.

Al Ekeko se lo ha asociado con Tunupa, personaje mítico, probablemente porque así lo consigna Bertonio en su Vocabulario de la lengua Aymara. Últimamente con Ikiko, en una leyenda de La Paz (https://www.youtube.com/watch?v=DDk-R8H7DvU). Sin embargo, Juan Carlos La Serna, en su trabajo sobre “recorridos históricos del Ekeko y las Alasitas en el altiplano peruano” ubica la imagen más antigua del Ekeko de hoy, en el siglo XIX.

Aún falta consenso sobre cómo es que aparece el personaje y si es andino o no. Bertonio hace mención de él pero falta registro sobre su apariencia y en la figura actual, ésta corresponde a características, inclusive físicas (tez blanca, ojos negros, pelo, bigote y cejas negras y pobladas), diferentes a la gente del espacio altiplánico (lleva chullo, sombrero y cigarro en la boca).

Hace algún tiempo, trabajando sobre el sentido andino de su relación con el Pacha, me permití asociar, por analogía, la figura de representación del Ekeko, con la imagen del “turco” que fue el personaje trashumante cuya labor era llevar mercadería. Esto básicamente porque, en una aproximación a la matriz cultural andina, se la ubica como cultura relacional holística de todo con todo en el Pacha.

En su trabajo sobre “Filosofía andina”, Josef Estermann (2006) precisa que la “relación es sagrada” y que el cuidado de la relación se expresa a través del rito en el cual deben participar todos aquellos que se relacionan; la participación es presencial ya sea en cuerpo o en “ajayu” (illa o mollo). En ese entender, se podría inferir que el Ekeko es una illa que en el ritual que renueva los compromisos vitales, presenta al comerciante que iba de pueblo en pueblo tomando pedidos y haciendo llegar la mercadería, función que era cubierta por “el turco”, que llegó junto con los españoles y sobrevivió hasta entrado el Siglo XX.