|
|
|
Enrique Nolte (Lima, 1947), zootectnista de profesión, especializado
en sistemas integrales de desarrollo, hizo llegar, como aporte a los
que se preocupan por la problemática de Puno y su patrimonio,
el siguiente artículo.
ALPACAS: RIESGO DE EXTINCIÓN (**) |
En una impecable exposición científica de la Dra.
Jane C. Wheeler (Ph.D.), Vicepresidente en el área de Investigación
de CONOPA (Coordinadora de Investigación y Desarrollo de Camélidos
Sudamericanos), se lanzó esa expresión tan preocupante,
a la vez que plenamente sustentada en información primaria, suficiente,
seria y verificable, de la cual me hago eco.
La exposición fue ofrecida en el marco de Taller Nacional
"Estrategias Socioeconómicas, Experiencias y Avances Tecnológicos
en Camélidos Sudamericanos el Perú" realizado el
15 y 16 de Julio de 2005 en la Universidad Católica de Santa
María, de la Blanca Ciudad de Arequipa y convocado por REDICAS
(Red de Información de Camélidos Sudamericanos).
La Coordinadora de esta Red que auspician la UCSM, el PNUD y
CONCYTEC y Presidenta del Comité Organizador ha sido la Antropóloga
Gleny Góngora, profesional de vasta experiencia en el tema, desde
los tiempos del Programa de Repoblamiento de la década del 80.
Aunque la Dra. Wheeler señala que algunos le han achacado
el uso de términos "terroristas" en el afán
de levantar la atención sobre sus hallazgos, la verdad monda
y lironda es que ciertamente, con menos del 9% de las alpacas que no
hayan sido cruzadas con llamas, es decir, con menos de 9% de alpacas
verdaderas y no sus cruces, se habla con razón de ese malhadado
y ojalá prontamente superado término de riesgo de extinción.
La exposición mostró con múltiples evidencias,
como es posible trazar hacia atrás, el origen de la llama en
el guanaco y el origen de la alpaca en la vicuña. Es una de las
maravillas que el dominio de los análisis de ADN permite. Sí,
de ese mismo tipo de prueba que hoy sirve para identificar a las joyitas
que hacen hijos e hijas que luego no quieren reconocer.
La segunda mitad del siglo pasado, bajo la justificación
de obtener animales de mayor peso corporal e ingresos por su venta para
carne, vio una aceleración incontrolada de un empadre cruzado,
generando los llamados "huarizos", más corpulentos
pero con la fibra engrosada y, por lo tanto, de un valor industrial
y monetario mucho menor.
En el marco general de este problema, también se pusieron
en contexto los graves y penosos acontecimientos asociados al proceso
de conquista y coloniaje, por los cuales se diezmó la población
de vicuñas y alpacas, minimizando su respectivo "pool"
genético (es decir, los múltiples, variados genes pertenecientes
a cada ubicación o "locus"). Además, al diezmarse
también la población humana, se liquidó también
a una gran parte de los conocimientos que habían permitido crear
a las alpacas y a las llamas.
Como bien dice el Antropólogo cusqueño Jorge Flores
Ochoa, "la alpaca es una obra del hombre", como lo son las
Pirámides de Egipto o la escultura La Pietá. Siglos y
siglos de observación y estudio de las especies silvestres (vicuña
y guanaco), para ir avanzando en su captura, selección y adaptación
a una vinculación más cercana con la humanidad. Hasta
llegar a nuestras muy accesibles y dóciles, alpacas y llamas.
Gran parte de esa obra quedó casi aniquilada en las primeras
décadas de la conquista; y la parte que sobrevivió, la
estamos extinguiendo ahora.
Por eso es que Jane Wheeler no solo tiene razón sino
un gran mérito en ese reto que se ha impuesto, de hacer conocer
las realidades ya descubiertas y demostradas, para que pasen de ser
titulares ocasionales y olvidables, a medidas concretas de acción,
del Estado, sí, pero también de toda la Sociedad Peruana.
Doblemente siendo una persona de origen británico, que ha optado
por entregar su vida a una causa de tanta importancia para el Perú
y los peruanos, como su propio esposo, el Dr. Raúl Rosadio, prestigioso
Médico Veterinario e investigador científico también.
En la presentación, fue entre muy racional a la vez que
emocionante (y penoso), ver cómo se iban mostrando las pruebas,
una tras otra, de las afirmaciones que motivan estas Reflexiones. Usando
conocimientos avanzados y equipos sofisticados de última generación,
la biología molecular ha ayudado a ver con la mayor claridad
imaginable, las variaciones, agrupaciones y distribuciones de grupos
de genes.
Ante tamaña evidencia, no corresponde otra cosa que
los propios ganaderos y sus organizaciones, las instancias sectoriales
responsables del Subsector Pecuario de Agricultura, al igual que sus
pares regionales, el Congreso y la vasta institucionalidad académica
y organizaciones no gubernamentales de desarrollo, concierten rápido
y actúen más rápido aún: Urge un Plan para
proteger a ese mínimo pocentaje de alpacas puras, tanto de la
contuinuación del cruzamiento y consecuente dilución genética,
como de la fuga del medio nacional por vías legales o ilegales.
En obvio que los costos, el equipamiento y el personal con las
necesarias características, no están disponibles en cualquier
instancia ni en cualquier lugar. Son muy pocas las instituciones de
investigación científica, universidades y laboratorios
que cuentan con el equipo y personal necesarios.
Pero ello no puede ser un obstáculo que impida crear
un sistema de identificación de alpacas puras, para establecer
sobre ellas al carácter de Patrimonio Nacional o algo parecido,
y declarar subsiguientemente, su intangibilidad. Por lo menos hasta
que haya desaparecido el riesgo real, de esa hoy posible extinción
pantanosa, por la vía del cruzamiento indiscriminado.
Esas y otras medidas fueron discutidas en el Taller de REDICAS,
planteándose el compromiso de que, en cada una de las seis Mesas
Temáticas, los responsables elegidos democráticamente,
entreguen propuestas de estrategias a la Coordinación de la Red,
para su correspondiente difusión. Por lo menos para dos de ellas
deberá buscarse financiamiento, entre las cuales es imperativo
que se incluya las necesarias para proteger a nuestras alpacas.
De paso, se planteó también iniciar o acelerar
una campaña fuerte y profunda, para que se declare a la alpaca
como Producto de Bandera del Perú, a fin de proteger los derechos
de nuestro país como lugar de "CREACION" y no de "aparición"
de la alpaca.
"Hay, hermanos, muchísimo que hacer"... pero
¡ya! |
(**) En: Agronoticias. Lima, Perú. Nº
302, Jul. 2005, Pág. 58. |
|
|
|
|
|